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Quiero sacarte esos ojos (Crónicas del 760 de Adolfo López Mateos)

Desde el escritorio de Usher Se sentó volteando la silla, mirando a su presa, sabía lo que tenía y lo que iba a hacer, se paró, miró a su víctima con delicia, como saboreando la hazaña a realizar…- Natalia es una chica que da la apariencia de cualquier otra señorita, va a trabajar, vuelve a su casa, hace sus quehaceres y en las noches va a los bares a divertirse y tal vez a conseguir una aventura. Llegando la noche se arregla, se viste muy hermosa con un pantalón de mezclilla entallado, tacones rojos, una blusa negra con un bello escote y como siempre una sesión de maquillaje solo para resaltar su belleza natural. Sale sola, no ha llamado a sus amigas esta vez para que le acompañen en sus juergas, es así todos los últimos viernes del mes. Revisa que todo esté bien y se lleva su clásico encendedor de gasolina, luego de ir de un lado a otro por la ciudad pide al taxista que pare, desciende del vehículo y entra al bar, disfruta de la música, el ambiente, de la gent...

Alice what have you done

Desde el escritorio de Usher  Sueños de los perros, días de verano establecidos, conscientes de resultados incongruentes. Miras de pronto a todos y no les ves, observas pájaros, dodos invisibles, ardillas inconscientes color blanco. Te metes en el agujero del conejo. Ves gatos, orugas, huevos, pero a ti no, solo reflejos tuyos, reflejos de realeza, ideas que no se concretan con nada. Vivir los días, un conejo, reír a carcajadas, aliméntate con el humo del tabaco de sabores. La oruga sabe de ti y te cobija, la reina sabe de ti y busca tu cabeza. La oruga te llama, dice sin parar tu nombre, hace sus oraciones a la reina blanca, te escucha, pero no te responde dice que a la reina no le corresponde, dice que la tierra es suya, pero no la toma. Hacer al final una historia en un bote, volver a Inglaterra es un sueño que quiere vivir. ¡Entonces! Cierra los ojos, cierra los ojos, sigue tu sueño y vuelve a vivir.

Cómete todo si quieres crecer grande y fuerte (Crónicas del 760 de Adolfo López Mateos)

Desde el escritorio de Usher De repente los dos viejos sintieron como el calor de su corazón regresaba, no querían dejar de ver al niño, de abrazarlo, de tenerlo a su lado….    En el 760 de la Adolfo López Mateos se ve que un hombre viejo sale del edificio, cabizbajo arrastrando los pies al andar, usa sombrero y un traje sastre viejo de color café, sus zapatos de charol negro gastado revelan un pesar muy grande al andar, parece que estos ya conocen el camino y son los que guían su paseo.   Mientras tanto en el 569 del edificio que acaba de abandonar nuestro gastado caballero una dama prepara la casa, con un sacudidor va añadiendo polvo a cada habitación y cambiando el panorama, transformando el novísimo refrigerador con dispensador de hielo y demás complejos sistemas en un Kelvinator, la estufa con encendido electrónico era sometida a una  transformación similar.    Parecía que todo volvía a un tiempo remoto, a una historia remota, a una vida remota al simp...

Tarea para cambiar México

Al teclazo La Tarea si deciden aceptarla es sencilla, pero importante, lo único que tienen que hacer es que cuando vayan en su coche o en el transporte público -de ser en este último procuren ir en una ventana- den un saludo a la persona en el vehículo de al lado.  El chiste de esto -les doy sólo una pista- generar una mejor convivencia entre los mexicanos y que dejemos de ponernos el pie los unos a los otros.  Esto es solo una parte de la tarea, descubran ustedes el verdadero chiste de hacer esto y háganlo, es un paso pequeño pero importante para un cambio en nuestra sociedad.

Nocturne in C Sharp Minor No. 20

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Desde el escritorio de Usher Era una noche apacible, él, luego de ver a su amada descansando en su tumba volvió al estudio de su gran y rústica mansión victoriana, cerró las grandes puertas de roble de la estancia, fue hacia donde tenía las botellas de licor, tomó un vaso de la repisa que compartían botellas y copas, se sirvió un vaso de whisky y lo llevó a su lugar de lectura, un gran sillón de color vino de un gran respaldo.    Depositó el vaso en una mesita y luego fue hacia una gran consola, abrió las puertas donde tenía los discos y comenzó a revisar su colección. Por fin, al decidirse por uno lo tomó, lo sacó de su envoltorio y lo puso en el tocadiscos, posteriormente fue plácidamente a su sillón, tomó un trago de whisky, sacó un revolver de su chaqueta y lloró amargamente cuando empezaron a sonar las notas de una vieja canción, que antes recordaba con toda alegría....   Lloró y lloró durante toda la pieza, recordaba esos momentos en que ella jugaba en el jardí...

¡No eres virgen! (Crónicas del 760 de Adolfo López Mateos)

Desde el escritorio de Usher -¡No eres virgen!- gritó él fúrico mientras con sus dedos le sacaba los ojos a su amante y ante los gritos de su víctima él le cortó la yugular con una fuerte mordida… Rodolfo vive en el departamento 704 del edificio en el 760 de la Adolfo López Mateos, es un chavo pacífico al que le gusta todos los días dar de comer a los perros callejeros, siempre una gran bolsa de comida. Hoy ha llevado a su nueva conquista a su departamento, está nervioso, ansioso, con ganas de comérsela pronto… cuando entran en el apartamento él la deposita en el sillón de la sala y la besa sin parar, ella solo se deja amar, pareciera que es la primera vez que su cuerpo siente unos labios que le besan en todas partes. Casi todas partes, los labios de Rodolfo aún no tocan los de ella, él espera… Es morena, pelo corto pintado de rubio, ojos de color café, formas pronunciadas. Rodolfo le quita la blusa y deja al descubierto los grandes senos de su amante se los come a ...

Desde el escritorio de Usher | Ahora duerme, pero dentro de poco ella despertará y verás lo hermosa que es (Crónicas del 760 de Adolfo López Mateos)

-Ahora duerme, pero dentro de poco ella despertará y verás lo hermosa que es- decía él mientras tomaba de los hombros a la señorita, quien comenzó a temblar de miedo…     Ernesto llevó a su nueva "amante" por las escaleras de los apartamentos en el 760 de Adolfo López Mateos, ella era de pelo negro y largo, como a él le gustan, cuello delicado y rasgos finos casi como los de su esposa, a quien él amaba demasiado, como a nadie en el mundo. -Aquí es, el apartamento 364- Ernesto abrió la puerta y le ofreció la entrada a la dulce chica quien sin más decidió entrar al recinto, para después de que él cerrara la puerta rodearle con sus brazos el cuello y darle un beso apasionado, aunque él no dejaba de mirar en dirección a una de las habitaciones, parecía como si mentalmente se comunicara con alguien en ese recinto.   Él entonces besó el fino cuello que poseía tan dulce chica, para luego comenzar a desnudarle el pecho y dejar al descubierto sus del...