You did it good, kid.
La función de Méliès
“Constantine”
de 2005 es una película basada en personajes del universo de DC y su editorial
de contenido más… oscuro Vertigo... digo DC Black Label, está dirigida por Francis Lawrence, con un
guion de Kevin Brodbin y Frank Capello, música de Klaus Badelt y Brian Tyler,
la fotografía estuvo a cargo de Phillippe Rousselot –por qué si es algo que me
atrae mucho de un filme no había puesto quién estuvo a cargo de este
departamento antes. Misterios de la vida, como ¿por qué no me paga DC por hacer
esto? No, más bien eso es porque no necesito hacerlo porque DC me pague, sobre
todo de los films de Batman, que por cierto…-
El
elenco cuenta con las participaciones de: Keanu Reeves (John Constantine…
asshole), Connor Dylan Wryn (John Constantine de joven), Rachel Weisz (Angela e
Isabel Dodson), Shia LaBeouf (Chas Krammer), Tilda Swinton (Arcangel Gabriel),
Gavin Rossdale (Balthazar) –pone Apocalyptica en YouTube-, Djimon Hounsou (Papa
Midnite), Pruitt Taylor Vince (Padre Hennessy), Max Baker (Beeman) y Peter
Stomare (Lucifer).
En
una iglesia abandonada y destruida de México varias personas se dedica a buscar
qué puede hacerles ganar un poco de dinero, cuando a Manuel se le atora el pie
dentro de un hoyo, mismo en el que mete la mano y para su sorpresa saca una
bandera nazi que esconde la punta de la lanza de Longinus o Spear of Destiny.
El
buen Manuel decide de pronto alejarse con la lanza del lugar al escuchar voces,
cuando de pronto en la carretera accidenta a un coche para luego seguir su
camino como sin nada.
Más
tarde ya del otro lado de la frontera, en Los Angeles, una madre prepara el
desayuno tranquilamente hasta que descubre que a su hija “se le metió el
chamuco”, así que llama al padre Hennessy, quien no pudo con la tarea por lo
que decide llamar a un viejo amigo, John Constantine, quien con métodos un poco
fuera de canon –que incluyen destruir un espejo con el toldo de un carro- por
fin logra sacarle el diablo a la pobre niña.
No
sin cuestionarse por la presencia de ese demonio y su fin, que no era –salir en
alguna película de Friedkin- sólo poseer a la chica, sino usarla como medio
para pasar a este plano, algo que tienen prohibido, así que le pide al clérigo
que use su “don” para descubrir si hay algo anómalo.
Posterior
a su “exorcismo” va a su casa a fumarse otro cigarro porque si te estás
muriendo de cáncer pulmonar es lo más sano que puedes hacer en la vida.
Mientras,
del otro lado, Angela Dodson, como buena católica va a confesarse con el padre
y explicarle el don, extraño para ella, que posee, de saber donde están los
delincuentes y poder dispararles con certeza y matarlos, ante lo que el padre
le dice que Dios tiene un plan para todos.
Por
otro lado su melliza, Isabel, internada en un centro psiquiátrico, decide
suicidarse, algo que siendo una ferviente católica sabe que no debe hacer, no
sin antes dejar un mensaje.
Al
otro día su hermana se da cuenta de la causa de su sobresalto de anoche, ya que
le informan que su hermana se aventó desde el techo del hospital, cayendo en la
piscina, ante lo cual ella se niega a aceptar que su pariente haya decidido
hacer tal cosa y se decide a conocer la verdad.
Mientras,
el buen Constantine, acude al hospital por buenas noticias, morirá de cáncer.
Luego
de su visita al doctor, Constantine, decide aprovisionarse con aliento de
dragón, agua bendita del mismísimo río Jordán y un escarabajo de Amytiville de
su buen amigo Beeman, a quien también le comenta la situación con el demonio
que acaba de “deportar”.
Luego
de sus “compras” John decide ir a ver al mismísimo arcángel Gabriel y
preguntarle por la situación de su “retiro”, encontrándose con Angela –de nuevo,
por cierto-, quien va a la iglesia pidiendo que su hermana sea enterrada bajo
el canon católico, aun sabiendo que bajo las leyes de esa religión no se puede
hacer.
Por
su parte el padre ayudado de su don -que viéndolo bien no es nada agradable-
descubre la nota del suceso de Isabel.
A
su vez Angela, decepcionada de su reunión se dirige a su casa a seguir con su
investigación, viendo el video del suicidio de su gemela, dando con el nombre
de “Constantine” a quien decide ir a buscar.
John
por su parte sufre el ataque de un demonio donde da utilidad a su escarabajo, por
lo que después decide acudir con Papa Midnite a pedir “la silla” y ver qué
diablos pasa, pero Midnite se apega a su neutralidad para negársela, aunque al
mismo tiempo mantiene una cita con Balthazar.
Así
que el protagonista se marcha a su recinto, donde recibe la visita de Angela,
quien le comenta el caso de su hermana, mientras él con la mayor sensibilidad
posible le dice que no le ayudará, hasta que descubre que es perseguida por
demonios.
Mientras
Hennessy decide hacer una visita a la morgue, en específico al cuerpo de Isabel,
para después querer apagar las voces en su cabeza con alcohol, aunque se le
pasa la mano, aunque antes de morir deja un mensaje a su amigo.
Quien
luego de contarle a la policía su visión del conflicto Dios-Diablo-humanos, le
acompaña a atender el reporte por su amigo, recibiendo el mensaje que él le
dejó.
Así
que ayudado de Beeman, quien también le ayuda con sus investigaciones, descubre
que Mammon, el hijo de “Luci”, quiere adelantarse a su padre para tener su
reino de terror en la Tierra, padeciendo la ira de Balthazar, quien también
está involucrado en el asunto.
Ante
la duda de Constantine sobre el asunto de la hermana de Angela y las muertes de
sus amigos decide ayudar a la policía a recuperar su don, ya que ella al igual
que su hermana –y él- ve cosas que los humanos no deberían ver, haciendo que se
meta en una tina llena de agua, aunque se toma su tiempo para decidir si con
poca o nada de ropa… Tan seriecito… -No, la escena está chingona-.
Es
esta sesión la que ayuda a los protagonistas a saber quién ha estado –en parte-
detrás de las muertes de sus conocidos; es por eso que el buen John decide ir
hacer pagar por sus acciones al “híbrido”, quien por órdenes de “alguien más”
ha buscado tener en su poder el medio para hacer que el hijo de Satanás llegue
a este plano.
Luego
de partirle… Ejem… Saldar cuentas con el demonio John se enfrenta a otro
problema, algo se ha llevado a Angela, así que vuelve a insistir con Papa
Midnite para que le preste la silla, tocando –de la manera más amable- a la
puerta de su bar y su oficina.
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