Nuevo Inquilino (Crónicas del 760 de la Adolfo López Mateos)

Desde el escritorio de Usher

Պ

-Todo el cuarto se ilumina con las llamas que surgen de la marca que hay en el piso…

17 de octubre

Hace una semana que me mudé al departamento 777 en un complejo ubicado en el 760 de la Adolfo López Mateos, tengo que admitir que no creía en historias de fantasmas y demonios, para mí eran cosas irrisorias, cada vez que escuchaba ese tiempo de relatos me reía sin parar al grado de que me dolía el estómago, pero desde que me mudé aquí no he parado de tener... pesadillas que provocan que me despierte a media noche, además que escucho alaridos que parecieran provenir de las paredes.

Aún así me negaba a creer en habitaciones encantadas, así que empecé a elaborar mil y una teorías de los sucesos que pasaban en mi nuevo hogar, no pienso mudarme por lo que yo llamo niñerías, así que aún con lo que está sucediendo he decidido seguir habitando este departamento.

(Nota al pie: Grabo este diario a partir del séptimo día de mi estancia aquí porque un extraño presentimiento me siguió desde el primer día de mi mudanza, además de que esta grabadora me la regaló mi novia y decidí que lo mejor era usarla para grabarle historias de miedo que tanto le han llamado la atención desde hace mucho tiempo)

18 de Octubre

Esto empieza a empeorar, hoy no pude dormir bien por un extraño sueño que tuve. Abría de pronto los ojos y me encontraba en un ataúd, no podía moverme y sólo escuchaba afuera la tierra caer sobre mi féretro y en lugar de escuchar lamentos, como en cualquier funeral, comencé a escuchar carcajadas que acrecentaron mi pánico, intentaba despertarme pero no podía,  comencé a desesperarme hasta que por fin logré abrir los ojos.

 

Estaba sudando frío, me paré y fui a la cocina, tomé un vaso de la alacena, me dirigí al lavabo, abrí la llave pero no salió nada durante un rato, aunque se empezaron a escuchar ruidos extraños como si algo obstruyera el paso del agua, golpee el grifo y de pronto salió el agua, aunque se veía tierra en ella, tiré esa agua sucia y volví a abrir la llave, esta vez salió una mezcla extraña carmesí, por curiosidad la probé, aunque con algo de miedo y al degustarla un poco la escupí, tenía un sabor ferroso que me pareció sangre así que vacié el contenido restante del vaso en el fregadero.

Volví a la cama con el sabor aún en mi boca, volví a dormir esperando ya no tener ningún otro sobresalto y así fue.

19 octubre

Hoy he pasado toda la noche pegado a la puerta del departamento esperando que alguien la abra, ya que yo intenté hacerlo, pero no pude, y es que la verdad ese sueño que tuve me turbó demasiado, en el podía ver y sentir como estaba atado con cadenas a una especie de altar, estaba rodeado por cinco tipos, diciendo lo que me parecieron oraciones en un lenguaje desconocido para mí.

Cuando de pronto el que estaba del lado de mi cabeza se acercó más a mí, yo no podía hablar, sólo pataleaba y daba manotazos con la limitante de las cadenas, posteriormente el tipo sacó de entre sus ropas una daga, mientras poco a poco los rezos se incrementaban en cuanto a la intensidad con que eran recitados, al momento que la daga tocó mi pecho comencé a sentirme desesperado y cuando el arma empezó a hundirse en mi cuerpo desperté sudando frío.

 

Me paré de la cama, quise salir a tomar un poco de aire, pero no pude abrir la puerta del departamento, comencé a desesperarme y empecé a gritar sin control, ya no podía volver a mi habitación, me aterraba acostarme, me aterraba dormir, me aterraba soñar, así que sólo me senté contra la puerta y esperé el amanecer.

20 de octubre

Hoy he vuelto a tener el mismo sueño de ayer, me he quedo un rato en la cama sentado en una orilla, no me quería tumbar, no me quería dormir así que sigo despierto y pensando en muchas cosas...

Hay un extraño resplandor en la sala, voy a ver qué pasa, me llevo la grabadora por si acaso, este departamento me ha enseñado que debo mantenerme alerta y que si algo llega a sucederme debo dejar un testimonio de lo que me pasó.

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¡¡¡Oh santa madre de dios, que demonios pasa aquí!!! Las paredes, todo ha cambiado, parece que estoy en otro lugar, la sala ha cambiado ahora luce más grande, pero lo más impresionante es que todo el cuarto se ilumina con las llamas que surgen de la marca que hay en el piso, mejor me voy de aquí…

¡Pero que diablos!, ¡qué pasó con la puerta!, ¡donde está!, ¡donde diablos está! Palpo por todos lados, pero solo hay pared, por favor… ¿qué pasa aquí?.. ¿qué pasa aquí?.. ¿qué diablos pasa en este lugar?, ¿qué diablos es este lugar?

La marca, que es como una letra extraña para mí aparece por todos lados, ¿qué suena? Son como rezos o cantos… no… puede… ser son los de mi sueño… ¡DÉJENME EN PAZ!..

¡No!, ¡no!, ¡no!, ¡suéltenme! ¡¡¡¡NOOOOOOOOOOO… DÉJENME IIIIRRRRRR!!!!

06:00 horas, 21 de octubre, el encargado de los departamentos se levanta de su cama, sube al cuarto 777 y lo abre, encuentra el lugar casi vacío, sólo hay una grabadora en el piso  a la entrada del recinto, el hombre la toma y la guarda en sus bolsillos, sonríe, dejando ver unos dientes amarillos, sale a la calle y en la entrada al complejo pone un letrero, luego regresa a su cuarto. “Se renta departamento”…

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