Mujeres en los Juegos Olímpicos, una competencia contra la discriminación

Al Teclazo 

En la actualidad es muy común ver a atletas y paratletas, hombres y mujeres, marchar juntos en las inauguraciones de los Juegos Olímpicos. Sin embargo el ambiente deportivo y de las Olimpiadas muchas veces ha sido muy excluyente para las deportistas. Esto desde sus orígenes en la antigua Grecia, por lo que las mujeres han tenido (como en muchos otros ambientes) que pelear muy fuerte por ser incluidas en el ambiente deportivo, soportando mucha discriminación por parte de autoridades, compañeros y del público.

De hecho uno de los opositores a que las mujeres participaran en los Juegos Olímpicos fue uno de los que promovió su regreso del olvido en que se tuvieron por mucho tiempo, el francés Pierre de Coubertin, quien al respecto señalaba: “los Juegos son la solemne y periódica exaltación del deporte masculino, con el aplauso de las mujeres como recompensa”, añadiendo: “En lo tocante a competiciones deportivas públicas, la participación de la mujer debería estar absolutamente prohibida”. y es que el barón consideraba que la presencia de una mujer en un estadio resultaba antiestética, poco interesante e incorrecta.

A Coubertin se unieron las quejas del papa Pio XI (1922-1939), quien incluso promovió una campaña en contra de la admisión de las mujeres en los Juegos Olímpicos, misma que no tuvo éxito.

A pesar de eso, las mujeres comenzaron a participar en los Juegos Olímpicos, aunque no con el pie derecho, ya que en 1900, cuando se les abrió la puerta a las competencias, sólo pudieron participar en deportes "que se consideraban aptos para ellas", como golf, croquet y tenis, siendo hasta los juegos de Amsterdam en 1928 cuando se daría una participación importante de atletas mujeres, con cerca de 300 deportistas, ya que fue casi del 10 por ciento del total de atletas. Además de que en esta edición se les permitió participar en el ambiente del atletismo también.

Un poco de historia

Como hablamos en un texto anterior, las olimpiadas surgieron en la Grecia antigua en el siglo VIII Antes de Cristo, pero a las mujeres no se les permitió participar y sólo las mujeres solteras podían ser parte del público. Sin embargo, en en esa época surgieron los Juegos Hereos, que fueron concursos deportivos que se organizaron en Argos y Olimpia en honor de la diosa Hera.

Durante la Edad Media en Europa sólo las mujeres de clase alta podían practicar como deportes los hípicos o la caza, mientras que en China entre las mujeres se hizo popular el practicar el cuju, un juego de pelota parecido al futbol. Algo que se plasmó en el arte de la época.

En la era moderna y con los Juegos Olímpicos el panorama de las mujeres, como mencionamos, no cambió mucho, ya que sólo se les permitió participar hasta Paris 1900. fue en esos juegos donde destacó la participación de la tenista británica, Chartlotte Cooper, primera campeona olímpica de la historia, aunque no la primera medallista, ya que el sistema de preseas se implementó hasta los juegos de Saint Louis, Estados Unidos, en 1904.

Cooper fue una tenista muy destacada ya que ganó cinco campeonatos de Wimbledon, el último a la edad de los 37 años, siendo la ganadora de mayor edad en la historia de esa competencia (récord que ostenta hoy en día).

Otro dato que hay que señalar de la justa olímpica de Paris a inicios del siglo XX es que la representación femenina representó sólo el 2 por ciento del total de deportistas que participaron en el evento.

Otro obstáculo que tuvieron que superar las mujeres fue que el Comité Olímpico Internacional (COI) no les permitía participar en más eventos deportivos, ya que consideraban "que no eran buenos para ellas". De hecho los deportes en los que competían eran golf, tenis, croquet, tiro con arco (1904), patinaje sobre hielo (1908) y natación (1912).

Fue por eso que mujeres realizaron los Juegos Mundiales Femeninos. Iniciativa que surgió por parte de Alice Melliat, fundadora de la Federación de Sociedades Femeninas de Francia  y organizadora de la Federación Internacional Deportiva Femenina. Estos juegos se realizaron en cuatro ocasiones (1922 en París, 1926 en Gottenburgo, Suecia; 1930 en Praga y 1934 en Londres), eventos donde se realizaban competencias deportivas de mujeres y que cada vez cobraban más importancia. Esta competencia desaparecería finalmente cuando el COI aceptó ampliar los eventos en los que podrían participar las mujeres en los Juegos Olímpicos.

Como señalamos antes fue en los juegos de Amsterdam en 1928 cuando las mujeres empezaron a tener una participación más significativa que el 2 por ciento de 1900, ya que alcanzó casi el 10 por ciento (que seguía sin ser el suficiente). Aunque a partir de ahí en unos años la participación de las mujeres se iría incrementando, ya que en 1976 en Montreal la participación de mujeres creció al 20 por ciento, en 1988 en Seúl un 25 por ciento y un 35 por ciento en Atlanta, 1996.

Los avances en ese marco se fueron dando en Sydney 2000 y Atenas 2004, donde cuatro mil 329 mujeres participaron, mientras que para Londres 2012, 46 por ciento de los deportistas que participaron eran mujeres. Para estos Juegos Olímpicos de Tokio 2020, de acuerdo con la página oficial,  casi 49 por ciento de los atletas que están participando en los diferentes eventos son mujeres.

Aún hay mucho por lo que luchar

Sin embargo no todo ahora para las mujeres es miel sobre hojuelas, ya que ahora han iniciado campañas en las que luchan contra la sexualización de las participantes en los eventos deportivos. Siendo dos los que han llamado la atención en las últimas fechas.

El primero lo protagonizó el equipo noruego de balonmano de playa, ya que en su partido donde disputarían la medalla de bronce de la Eurocopa de Balonmano Playa 2021, realizado en Bulgaria, fueron sancionadas con 150 euros por participante (siendo un total de mil 500 euros lo que se tendría que pagar en total) debido a que en el encuentro usaron "vestimenta inadecuada", ya que en lugar de usar un bikini, decidieron usar shorts como protesta contra la sexualización de las mujeres en este tipo de eventos y romper los estereotipos de género.

Este evento generó tal conmoción que la cantante PINK se ofreció a pagar la multa y condenó la decisión de la Federación Europea de Balonmano. Al final de cuentas dicha instancia en un intento de "lavarse la cara" por el suceso señalando que el dinero de la multa se donó a una fundación deportiva internacional que apoya la igualdad de mujeres y niñas en el deporte.

Mientras que por otro lado el equipo alemán de gimnasia femenil decidió dejar de lado los uniformes de corte de bikini, para utilizar versiones de cuerpo completo, esto con la intención de luchar contra la "sexualización en la gimnasia", algo que apoyó incluso la federación del deporte germana, instancia que añadió que el objetivo es "presentarse estéticamente sin sentirse incómodo".

Al respecto la gimnasta teutona, Elisabeth Seitz declaró: "Queríamos mostrar que cada mujer, todo el mundo, debería decidir qué ponerse".

Sin duda hay mucho que se tendrá que ir cambiando en el ambiente deportivo femenino, en el que se vayan borrando los perjuicios y las limitantes para que las mujeres sigan siendo parte del ambiente de paz y deportividad que deberían ser los Juegos Olímpicos.

Fuentes: Wats | La Vanguardia | EFE | Con la A | CNN | El Financiero | Olympics.